Esta noche participe de la conferencia de Richard Stallman en el uno de los salones del Banco Central del Paraguay. En la conferencia Richard trató algunos puntos, los principales, de la filosofía del movimiento "software libre", movimiento que lidera desde la Free Software Foundation o Fundación Software Libre Latino América.
Si bien fue una conferencia introductoria a esta materia, fue interesante (ya desde 1996 vengo implementado este tipo de sistemas tanto en el sector privado como en el sector público). El discurso (tal vez en el sentido que le da Foucault) esencialmente se centra en las Libertades del hombre y los derechos que este debe tener para ejercer diversas libertades frente a la tecnología y a la informática en particular (Libertad ante el uso, Libertad a estudiar el funcionamiento, Libertad de compartir o distribuir, Libertad de mejorar un programa).
Richard afirma que la Educación debe ser libre, esto implica que en el sistema educativo debe insertarse herramientas de software libre para el estudio y el aprendizaje de tal forma a que el alumno al salir del sistema educativo haga uso de las libertades antes descriptas.
Estoy completamente de acuerdo con esto. Pero nuestra realidad es otra. Nuestro Estado al no tener políticas claras sobre estos temas, acepta cualquier tipo de donación de empresas del software privativo y la implementan en las escuelas públicas, lo mismo sucede en el sector privado. Hoy estamos educando a niños que no serán libres mañana.
En la Universidad sucede algo parecido y aun mas dañino desde el punto de vista social. En varias Facultades existen profesores que profesionalmente tienen la representación de determinados productos con licencia privativa. Esta actividad es plenamente lícita, esto es indiscutible. Lo que sí me parece hasta criminal por el daño social que ocasiona es que estos profesores (y discípulos como el pollo W.) inserten en los programas de estudio de estas facultades materias donde esencialmente se enseñe en la práctica el uso de algunos software con licencia privativa. El profesional informático de nuestro país luego sale al mercado y solo sabe hacer o aplicar su técnica con estas herramientas. Este hecho pervierte el mercado. En muchos casos estos mismos cursos son como una especie de selección de personal para las empresas y/o proyectos donde el profesor utiliza estas herramientas, armándose así un circulo vicioso de una alta dependencia con software de determinadas marcas.
Nuestro Estado debe ejecutar planes apuntando a una Educación Libre, desde la primaria. Y la Universidad debe erradicar estas prácticas apuntando al desarrollo tecnológico del país y no al desarrollo de determinados nichos de mercado.